Todos los días, millones de personas de todo el mundo se suben al tapete de yoga para experimentar la unión de cuerpo, mente y alma. Pero, ¿te imaginas este sentimiento multiplicado por mil?
¡Los festivales de yoga son la perfecta oportunidad para potenciar tu Namaste! Sólo imagínate –practicando tus poses en compañía de miles de yoguis, respirando en sincronía con ellos, escuchando los mismos sonidos que tú y sintiendo esa unión en un mismo lugar.
Un festival, al reunir a personas de docenas de países con una misma intención, ofrece la posibilidad de enriquecer nuestra práctica del yoga de una forma única. Conocerás gente que te ayudará a vivir las 8 ramas en todo su esplendor y podrás empatizar con más gente que ha logrado llevar su práctica a otro nivel.
¿Listo para unirte a un festival de yoga? Te garantizo que ninguna de estas expresiones pasará por tu cabeza al concluir el evento:
No conocí gente interesante
Un festival de yoga es un evento perfecto para ampliar tu red de contactos y añadir un montón de personas interesantes a tu lista de amigos. Con una amplia diversidad entre la gente que asiste, solo es cuestión de estar presente y abierto para conectarse con alguien que podría terminar siendo tu colega, maestro, colaborador, o incluso pareja o amigo de por vida.
Hubo demasiado tiempo de inactividad
El programa de un festival de yoga suele estar repleto de eventos increíbles. Entre meditaciones, clases de yoga, conciertos, talleres, lecturas etc., encontrar qué hacer no será complicado en absoluto.
Por lo general, los festivales duran más de 3 días, por lo que tendrás bastante tiempo con actividades muy variadas para mejorar tu práctica de yoga y vivir una vida más plena. Mi recomendación es que te inscribas a cuanto evento sea posible y, si tienes la posibilidad,prueba con un nuevo estilo de yoga. Yo hice Yoga Aérea en el Wanderlust y meencantó.
El lugar era muy feo
Los festivales de yoga no solo ofrecen una maravillosa oportunidad para conectarse con otros, sino también con la naturaleza.
Los organizadores de prácticamente todos los festivales hacen un gran esfuerzo para elegir un bonito lugar y ayudar a los yoguis a disfrutar de su tiempo en él.
Hay festivales en islas paradisiacas, como el Bali Spirit Festival; en la capital del yoga en Rishikesh; en las relajantes montañas de Nepal; o en las playas más bellas del mundo. En realidad, solo tienes que elegir tu destino favorito y aventurarte a vivir esta increíble experiencia.
No aprendí nada nuevo
En primer lugar, habrá mucha gente de quien podrás aprender sobre su cultura, historia, tradiciones, etc. Para esto, ¡solo tienes que hablar! Pero si eres más tímido y no estás dispuesto a tener largas conversaciones, tendrás a tu disposición un montón de clases con nuevos estilos para iniciar tu práctica.
Los maestros suelen ser de clase mundial y siempre hay una gran variedad de estilos que puedes aprender. Kundalini Yoga, Power Vinyasa, Iyengar Yoga, Kriya Yoga y muchos más tipos de yoga que podrás agregar a tu repertorio.
Además, los talleres suelen ser impartidos por expertos en el tema y a veces hasta hay lecturas de grandes maestros espirituales provenientes de todo el mundo.
Fue muy aburrido
Honestamente, si has llegado al último párrafo de este artículo, es prácticamente imposible que no la pases increíble en cualquier festival de yoga. Quiere decir que ya estás pensando en ir a un evento de este tipo y solo necesitabas un empujoncito para animarte.
No hay forma de que no te diviertas. A fin de cuentas, pasarás varios días haciendo algo que amas, conociendo a personas de ideas afines, desarrollando nuevos hábitos y adquiriendo conocimientos útiles. ¿Qué más puedes pedir? Un festival de yoga es el evento ideal para ti.
Alberto G. Güitrón es escritor y practicante de yoga. Es colaborador en BookYogaRtetreats.com y ha sido publicado en el Huffington Post, The Wellness Universe, Yoga Matters, Bad Yogi, Do You Yoga, y otros sitios relacionados con yoga y bienestar. También es autor del libro El Sueño de Unos.