Combinar el intenso entrenamiento cardiovascular que implica el ciclismo indoor con el yoga, y la práctica de estiramientos para la mente y el cuerpo, con el fin de alcanzar un equilibrio interior, pueden parecer antagónicos, pero los expertos en fitness aseguran que funcionan y ambas actividades se complementan.
Si eres un fiel prácticamente de yoga, compleméntalo con alguna de estas bicis estáticas, pero si además, te consideras un gran aficionado del ciclismo indoor, la práctica del yoga será un ajuste fenomenal para adquirir un mejor equilibrio muscular.
Y es que algunos profesionales del yoga y el ciclismo ya le han puesto nombre a la combinación de ambas disciplinas, se trata de Yoga Ride, Cycle Yoga o Spin to Ride. Ambas actividades, que son tan diferentes en su estructura y acción en el cuerpo, se complementan para mejorar, tanto la forma física, como la flexibilidad.
Según los profesionales de estas disciplinas, se trata primero de girar y luego estirar. El ciclismo es una práctica deportiva intensa que se puede realizar, tanto en casa como en gimnasios o al aire libre, donde se pone en juego la capacidad cardiovascular. Esta se suele practicar por unos 30 minutos, para luego cambiar la marcha y pasar a estirar todos los músculos que se hayan tensado.
Entonces, se habrá conseguido realizar una rutina de 60 minutos, con ejercicios de cardio, flexibilidad y fortalecimiento muscular. Lo ideal es concebir una rutina en la que se ponga en marcha tu ritmo cardíaco durante la primera parte del entrenamiento, para luego entrar al yoga de una forma rápida. De esta manera habrás entrenado todo el cuerpo en una hora.
Para cumplir con el objetivo de esta práctica combinada, la transición al yoga debe ser rápida, por lo que lo ideal es hacer el trabajo cardiovascular y luego adoptar una postura de yoga que sea fácil. El uso de una música adecuada que te motive en las dos partes del entrenamiento es esencial, por lo tanto, habrá que hacer una selección concienzuda de la misma.
Por una parte, debes escoger una música motivadora que te permita subir las pulsaciones mientras llevas a cabo la rutina de spinning; y por otra, una música cuyo ritmo te permita entrar en un proceso de meditación, donde puedas conectar cuerpo y mente para sentirte en equilibrio contigo mismo, con el entorno y el propio universo, tal como dictan los preceptos del yoga, en cualquiera de sus tipos.
Cambios corporales que se experimentan con la práctica del yoga y el spinning
Los especialistas de fitness están de acuerdo en lo acertado que es combinar ambos entrenamientos, compleméntalo con alguna de estas bicis de spinning para cumplir con los objetivos que te hayas planteado, así como también para registrar los mejores niveles de rendimiento físico.
Como el spinning es unidireccional, los músculos se sobrecargan y se tensan, por lo que las posturas de yoga permiten un alivio de los mismos, y al mismo tiempo, mejoran la fuerza. Una clase o rutina combinada, puede ser perfecta para los ciclistas que pueden no estar familiarizados con el yoga, y a la vez, puede resultar el mejor complemento para expertos en yoga que quieran darle un poco más de movilidad y tensión a sus músculos, realmente, son una combinación muy efectiva.
Los ciclistas que no tengan mucha experiencia con el yoga deben saber que para notar los cambios que se desean, en primera instancia no es necesario llevar a cabo posiciones muy avanzadas o difíciles. Pero si haces spinning de forma constante, como por ejemplo unas 4 veces a la semana, incluir por lo menos una clase de yoga, puede resultar ideal y muy productivo para tu plan de entrenamiento.
El yoga y el spinning encajan de forma natural
Con el énfasis en la relajación profunda que se consigue con el yoga, es posible establecer un buen equilibrio corporal, tras los estimulantes esfuerzos aeróbicos que se experimentan con el ciclismo.
Aunque un instructor puede ser la mejor guía para iniciarte en ambas disciplinas, la orientación que podemos conseguir a través de los diferentes medios online, pueden resultar un buen comienzo para adentrarte en ambas prácticas, en caso de que seas un principiante. Así que la intención con el yoga, es conseguir estirar los músculos específicos de la parte inferior del cuerpo, que son los que utilizamos cuando practicamos spinning, como pueden ser los flexores de la cadera, los isquiotibiales, las pantorrillas, y por supuesto, los cuádriceps.
Se puede decir que no se trata de combinar ambas actividades solo porque sí, sino de centrarse en zonas específicas del cuerpo, así que se considera que es una excelente opción para incorporar los beneficios del yoga a los ciclistas, y viceversa. Para los ciclistas, contar con los beneficios del yoga les permitirá centrarse en la flexibilidad, en el fortalecimiento de las caderas y en mejorar su postura, que es tan esencial para esta práctica.
Los yoguis y el ciclismo
Para los yoguis más experimentados, complementar su práctica con el ciclismo, les permitirá fortalecer de otra manera sus condiciones respiratorias y cardiovasculares. La intención de un buen deportista es mantenerse abierto a probar distintas disciplinas, y el spinning o la práctica del ciclismo, pueden ser alternativas muy convenientes y, tal como lo hemos indicado a lo largo de este artículo, se trata de una práctica complementaria.
Otro de los beneficios de combinar o fusionar ambas rutinas, es que hace que el tiempo te envuelva de una manera sublime, y encuentres mayor diversión y bienestar al finalizar la jornada. Es posible que el tiempo se te vaya mucho más rápido, incluso sin darte cuenta.
En resumen, ambas disciplinas revisten excelentes beneficios, que un buen deportista no querrá perderse. Mientras el yoga ayuda a nivel mental, espiritual y a conseguir un equilibrio corporal que encierra mucho bienestar, la práctica del spinning permite trabajar la capacidad pulmonar, cardíaca y ayuda a fortalecer toda la musculatura del tren inferior. Una combinación explosiva (en el mejor sentido de la expresión), que debes probar para disfrutar con los mejores resultados.
